todo el proceso, muy integrado en sus varias fases, se desarrolla en la planta de Villa d’Adda (Bergamo). Esta planta cuenta con cerca de 40.000 metros cuadrados, donde se transforma el alambrón en alambre galvanizado y posteriormente en malla electrosoldada galvanizada o plastificada. La instalación de Pontida (Bergamo), proporciona una gran flexibilidad y capacidad de producción.